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CONSTANTINO MAGNO
Flavius Valerius Constantinus Magnus |
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Flavio Valerio Constantino Magno nació
en fecha indeterminada entre los años 271-282 en Naissus, provincia de Moesia
Superior (actual Nish en Serbia), hijo de Constancio I y Elena, siguió -como
era lógico- la carrera militar.
Cuando se encontraba en la corte de Nicomedia
con Galerio, fue llamado por su padre para la campaña contra los pictos en
Escocia, y ante el lecho de muerte de Constancio, que entonces era Augusto de
Occidente, fue aclamado emperador por los soldados, pero él insistió en asumir
tan solo el título de César.
Con la muerte de Constancio I Cloro la crisis de La Tetrarquía
estaba servida, las tropas aclamaron como Augusto a Constantino mientras Galerio
elevaba a Severo II al rango de Augusto. Ese mismo año 306, Majencio usurpó el
poder en Africa e Italia, aprovechando el descontento
existente en Roma contra Severo II, e invitó de inmediato a su padre Maximiano a
compartirlo. Así pues, acababa el año 306 con cuatro emperadores en Occidente:
Constantino, Severo II, Maximiano Hércules y Majencio.
Severo II, a instancias de Galerio, intentó sofocar la rebelión
de Majencio y Maximiano, pero sus tropas le abandonaron, cayó prisionero, siendo
ejecutado en el año 307. Galerio, enfurecido por la derrota de Severo II comenzó
los preparativos para invadir Italia. Dándose cuenta de lo peligroso de la
situación, Maximiano se dirigió a la Gallia en busca de una alianza con
Constantino, cosa que consiguió al casar a su hija Fausta con él. Constantino,
que había dejado Britannia y vuelto al continente, abandonó a su anterior esposa Minervina, con la
que había tenido su primer hijo, Crispo.
El emperador decano y garante del sistema Galerio, convocó
la cumbre de Carnuntum (Pannonia
Superior) y entre octubre y noviembre del 308 se intentó reorganizar el
Imperio degradando a Constantino al grado de César, declarando a Majencio
enemigo público y otorgando el poder a Licinio, en sustitución de Severo II, para que reconquistara
Italia y
Africa. En dicha cumbre, Maximiano fue obligado a abdicar de nuevo y volver a su
antiguo grado de Senior Augustus (emperador retirado).
Pero todo siguió su curso: Diocleciano volvió a su
retiro, Maximiano continuó con su intrigas, el usurpador Majencio se sentía cada
vez más fuerte y ni Constantino en Occidente, ni Maximino II en Oriente, aceptaron
de buen grado el inédito título de Fillii Augustorum que
Galerio les había otorgado en dicha cumbre y menos aún, la ascensión de Licinio a Augusto sin
pasar previamente por el rango de César. Las heridas se habían cerrado en falso.
Muerto su padre y habiéndose enemistado con
Constantino (su anterior aliado contra Galerio) la suerte de Majencio estaba
echada, el propio Senado instó a Constantino para que desde la Gallia
reconquistara Italia. En su avance derrotó en Verona a
Pompeianus, el más experto de los generales de Majencio y en las
inmediaciones de Roma, en octubre del año 312, logró el definitivo triunfo
sobre las fuerzas comandadas por el propio Majencio, quien parece ser que puesto
a la fuga, se ahogó en el río Tíber al intentar atravesarlo por el puente Milvio,
pues parece que el puente se desplomó al no poder soportar el peso de tantos hombres.
La batalla del puente Milvium ha pasado a la historia como
un hito decisivo que marca el declive del culto pagano y el auge del
cristianismo como religión oficial, todo gracias a la conocida narración de Eusebio
sobre el "Sueño de Constantino".
"En vísperas de la batalla, Constantino invocó la ayuda
del Dios de los cristianos y tuvo un sueño durante el cual se le apareció una
cruz resplandeciente con estas palabras: "In hoc signo victor eris" (con este
signo vencerás). Luego mandó colocar en las enseñas de su ejército el anagrama
formado por las dos primeras letras griegas (Chi y Rho) del nombre de Cristo..."
Leyenda o no, lo que está claro es que muerto Majencio,
Constantino quedó como dueño absoluto de Occidente y que el Edicto de Mediolanum
(Milán)
promulgado conjuntamente por Constantino y Licinio al año siguiente (313), en acción de gracias por ganar dicha batalla,
supuso el reconocimiento del cristianismo.
Constantino gobernó largos años ostentando los siguientes títulos [1]:
| CAESAR |
306 |
| AVGVSTVS |
307 |
| PONTIFEX MAXIMVS |
307 |
| TRIBVNICIA POTESTAS |
Jul. 306 (I), dic. 306 (II), 307 (III), dic. 307 (IIII), 308 (V), 309 (VI), 310 (VII), 311 (VIII), 312 (VIIII), 313 (X), 314 (XI),
315 (XII), 316 (XIII), 317 (XIIII), 318 (XV), 319 (XVI), 320 (XVII), 321 (XVIII), 322 (XVIIII), 323 (XX), 324 (XXI), 325 (XXII),
326 (XXIII), 327 (XXIIII), 328 (XXV), 329 (XXVI), 330 (XXVII), 331 (XXVIII), 332 (XXVIIII), 333 (XXX), 334 (XXXI), 335 (XXXII) y 336 (XXXIII) |
| IMPERATOR |
Jul. 306 (I), 307 (II), 307 (III), 308 (IIII), 309 (V), 310 (VI), 311 (VII), 312 (VIII), 313 (VIIII), 314 (X),
315 (XI), 316 (XII), 317 (XIII), 318 (XIIII), 319 (XV), 320 (XVI), 321 (XVII), 322 (XVIII), 323 (XVIIII), 324 (XX), 325 (XXI),
326 (XXII), 327 (XXIII), 328 (XXIIII), 329 (XXV), 330 (XXVI), 331 (XXVII), 332 (XXVIII), 333 (XXVIIII), 334 (XXX), 335 (XXXI) y 336 (XXXII) |
| CONSVL |
307 (I), 312 (II), 313 (III), 315 (IIII), 319 (V), 320 (VI), 326 (VII) y 329 (VIII) |
| MAXIMVS AVGVSTVS |
Oct. 312 |
| GERMANICVS |
313 ? |
| GERMANICVS MAXIMVS |
313 ? (II), 318 (III) y 328-329 (IIII) |
| SARMATICVS |
313 ? |
| SARMATICVS MAXIMVS |
313 ? (I) y 323 ó 334 (II) |
| PERSICVS |
312 |
| PERSICVS MAXIMVS |
c. 315 |
| ADIABENICVS MAXIMVS |
c. 315 |
| GHOTICVS MAXIMVS |
315 (I), 328-329 ó 332 (II) |
| CARPICVS MAXIMVS |
c. 318 (tal vez Cappadocicus Maximus) |
| BRITANNICVS MAXIMVS |
313-314 |
| ARABICVS MAXIMVS |
c. 318 |
| ARMENIACVS MAXIMVS |
c. 318 |
| MEDICVS MAXIMVS |
c. 315 |
| DACICVS MAXIMVS |
336 |
En 315 d.C. Licinio había quedado claramente como dueño y
señor de Oriente al igual que Constantino lo había logrado en Occidente, sin enemigos comunes, la guerra civil no tardó en estallar entre los dos
antiguos aliados, ya en 314 se produjo una ruptura abierta entre Licinio y
Constantino y fueron libradas dos
batallas, sin resultado decisivo, pero a favor de Constantino, quien impuso entre
sus condiciones de paz la ejecución de A. Valerio Valente, el prefecto de
Licinio que había sido ascendido a César con la pretensión de sustituir a
Constantino.
En marzo del año 317 fue firmada una tregua por la posible intervención de Constancia
(esposa de Licinio y hermanastra de Constantino), entonces Licinio designó a su hijo
Valerius Licinianus Licinius como César, mientras Constantino hacía lo
propio con sus hijos
mayores (Crispo y Constantino II).
Pero las hostilidades se desataron de nuevo en 321 con varios
choques fronterizos. En 324, Licinio asoció al mando a su general Marco Martiniano a raíz de su nueva rebelión
y le nombró Augusto con el propósito de reemplazar a Constantino, pero en
Chrysopolis ambos fueron
definitivamente derrotados y huyeron a Byzantion en donde cayeron presos,
siendo Martiniano ejecutado y el emperador enviado a Thessalonica y puesto bajo arresto.
Licinio logró salvar su vida,
seguramente por intercesión de su esposa Constancia, pero el contumaz
emperador de Oriente parece que empezó a intrigar de nuevo. Constantino no le perdonaría
esta vez y en la primavera de 325 le mandaría
ajusticiar.
Todavía no había terminado el año 324 y Constantino I había
reunificado el Imperio, cuarenta años de "Tetrarquía", es decir de
gobierno entre cuatro o "Imperio Colegiado", habían quedado atrás para
siempre.
Constantino I es famoso por haber sido el primer emperador que
abrazó la religión cristiana. Aunque con el Edicto de Milán el cristianismo
simplemente se despenalizaba (el Cristianismo no se convertiría en religión
oficial del Imperio hasta el finales de aquel siglo, con Teodosio I), el
emperador dio un gran poder a los cristianos, una buena posición social y económica a su
organización, concedió privilegios e hizo importantes donaciones a la Iglesia,
apoyando la construcción de templos y dando preferencia a los cristianos como
colaboradores personales. En 325 convocó al famoso Concilio de Nicaea (Nicea) y asistió
personalmente a los debates en donde se fijaron los conceptos fundamentales de
la Iglesia Cristiana y se combatió al emergente arrianismo.
En 326, Constantino mandó ejecutar su hijo mayor Crispo y
unos meses después a su segunda esposa Fausta. Corrieron rumores sobre una
presunta relación entre hijastro y madrastra que supuestamente podrían haber
sido la causa de la ira de Constantino, sin embargo estos rumores se encuentran
poco documentados. Otra de las teorías es que Fausta, envidiosa (Crispo no era
hijo de ella y siendo un gran comandante militar era el más posible sucesor de
Constantino) le dijo al emperador que su hijo no respetaba el cristianismo.
Fuera por una u otra razón, la realidad es que después, Constantino al descubrir
el engaño se arrepintió y vivió atormentado por la muerte de su hijo primogénito.
Ese mismo año 326 decidió dejar Roma, permaneció en
Pannonia mientras se hacía construir una nueva capital. La antigua Byzantion
(Thracia) fue elegida por Constantino para ser convertida en una gran urbe y ese año colocó la piedra
fundacional de la ciudad que llevaría su nombre. Byzantion
fue reconstruida,
ampliada y pronto se convertiría (330) en la nueva capital del Imperio. Algunos
años más tarde llegaría a ser la ciudad más grande del mundo: Constantinopolis.
Constantino no solo reunificó el Imperio, sino que obtuvo importantes victorias sobre los francos y
los alamanes (306-308), de nuevo sobre los francos (313-314), los visigodos en 332 y
sobre los sármatas en 334. De hecho, sobre 336, Constantino había recuperado la
mayor parte de la provincia de Dacia, perdida desde
tiempos de Aureliano (271).
El emperador continuó la reforma introducida por Diocleciano que
separaba el poder civil y militar. Como resultado, generales y gobernadores
detentaban menos poder que durante la anarquía militar. Constantino convirtió el
viejo sistema de frontera fortificada en un sistema de defensa elástica con la formación de una gran reserva central en detrimento de las
tropas de frontera y el fortalecimiento de la caballería. Disolvió la Guardia
Pretoriana y en su lugar estableció las Schola Palatinae, cuerpos de
caballería de élite principalmente de origen germánico.
La reforma monetaria llevada a cabo por Constantino sustituyó el
áureo de 5,4 g. por una nueva moneda: el sólido de 4,5 g., moneda que, acuñada a
partir del 313, se mantuvo en el Imperio Bizantino nada menos que hasta el
siglo X sin prácticamente variación alguna en el peso. La creación de múltiplos
y divisores en oro como los sémises y nuevas piezas de plata denominadas silicuas y
miliarenses, junto a las populares monedas de bronce completaron la reforma.
En aquella época un sólido equivalía a 2 sémises, 18 miliarenses o 24 silicuas.
Poco antes de morir, Constantino planeaba una gran
expedición para poner fin a la rapiña de las provincias del Este por parte del
Imperio Persa, pero el gran emperador falleció en mayo del 337, siendo bautizado en
su lecho de muerte, divinizado por las autoridades paganas y declarado 13er
Apóstol de Jesucristo por la Iglesia Cristiana, permaneciendo hoy en día como
unos de los principales santos de la Iglesia Ortodoxa Griega.
Fue sucedido en el Imperio por los tres hijos de su matrimonio con
Fausta: Constantino II, Constancio II y Constante, quienes se aseguraron su
posición mediante el asesinato de sus propios familiares, como sus primos Delmacio y
Anibaliano.
[1] Titulaturas según indica J. M. Iglesias y J. Santos,
en su libro:
"Vademecum para la epigrafía y numismática latinas" (Santander 2002)